jueves, 11 de enero de 2007

Facundo Cabral

Ayuda al niño que te necesita, ese niño será socio de tu hijo. Ayuda a los viejos y los jóvenes te ayudarán cuando lo seas. Además, el servicio es una felicidad segura, como gozar a la naturaleza y cuidarla para el que vendrá. Da sin medida y te darán sin medida. Y que no te confundan unos pocos homicidas y suicidas. El bien es mayoría, pero no se nota porque es silencioso. Una bomba hace más ruido que una caricia, pero por cada bomba que destruye, hay millones de caricias que alimentan a la vida.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Holas tanto tiempo!!! muy lindo el texto... che todo bien???-.... bueno pase...hacia mucho q no andaba x aca... va en realidad hacia mucho q no tenia internet... jeje...

En fin... Nos vmos... y suertee...

A girl called María dijo...

aha,interesante escrito.
un saludo!

Marquito dijo...

Me tocó de cerca lo que escribiste...
Muy bueno, muy bueno...